12.08.2008

La venus de las pieles (1870). Leopold Sacher Masoch

Fue Richard von Krafft-Ebing quien en 1885 aprovechando el nombre del autor, dio nombre al masoquismo en un estudio sobre psicopatía sexual. Hoy esta obra y su autor son iconos del BDSM y lectura de obligado cumplimiento.
Del amor a la esclavitud, de la alegría a la tristeza, del fetichismo a la tortura, de la crueldad a la piedad, de la sumisión a la rebeldía el autor nos hace comprender las profundas emociones en las que desbocan los acontecimientos que él mismo experimentó durante su vida. No en vano, la novela está basada en sus propias vivencias y fantasías, con dos de sus compañeras sentimentales con las que firmó sendos contratos de esclavitud, con la primera de seis meses, la segunda fue su esposa y lo mantuvo hasta la muerte.A pesar de que esta es una novela del romanticismo, encontramos un debate que aún permanece vivo.
La visión de Masoch, muy revolucionaria para su tiempo, en mi opinión lo convierte en un visionario:
"La mujer, tal como la naturaleza la ha creado y tal como la educa ahora el varón, es enemiga de éste, y sólo puede ser o su esclava o su déspota, pero nunca su compañera. Sólo podrá ser su compañera cuando ella tenga los mismos derechos que él, cuando ella se iguale a él por la formación y por el trabajo. Ahora sólo tenemos la alternativa de ser yunques o de ser martillos."
Tal vez el BDSM sea el mundo soñado por Masoch, en el que ya no es una alternativa, sino una decisión personal como la que él tomó para escándalo de sus contemporáneos, cosa por otro lado sigue sucediendo en los que vivimos. Aunque hayamos avanzado mucho, la sociedad convencional sigue sin aceptar la opción de cada cual a vivir como mejor le parezca.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gustó un montón.Un saludo.